Pidieron a los diputados nacionales que revean el Presupuesto, respecto de la imposición de Bienes Personales.

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) advirtió que de avanzar la exención de Bienes Personales a los inmuebles rurales, contemplada en el Presupuesto 2019, se deteriorará aún más la rentabilidad de los productores. Si bien el Gobierno nacional anunció la posible desgravación de este impuesto vía Ganancias, "las PYMES agropecuarias no aguantan un impuesto más", señalaron en un comunicado.

"La presión tributaria es asfixiante y está generando una pérdida de rentabilidad significativa en todos los complejos productivos del interior del país. Seguir gravando a los productores agropecuarios nunca puede ser la solución. El único camino viable es aumentar la producción y las exportaciones con las economías regionales como pilares de la recuperación", detallaron.

La propuesta del Gobierno nacional es subir el mínimo no imponible de los actuales $1,05 millones a $2 millones, además de elevar la alícuota a un 0,75% para bienes con una valuación superior a $20 millones, en el cual se incluye a todos los campos. "Es decir, si prospera la derogación de Ganancia Mínima Presunta, tal como dispone el Presupuesto 2019, ahora todas las personas físicas que sean propietarias de campos comenzarán a pagar el impuesto patrimonial de Bienes Personales el año que viene", explicaron.

Al respecto, el vicepresidente de Economías Regionales de CAME, Eduardo Rodríguez, alertó que uno de los primeros impactos que tendría la imposición de Bienes Personales es un fuerte aumento en los arrendamientos. "Esto no es un dato menor en función de que el 70% de la agricultura se hace en campos alquilados", sostuvo.

Por último, advirtieron que el proyecto podría afectar el precio de los alimentos y aseguraron que desde CAME "esperamos que los diputados den marcha atrás con esta idea que va en contra de la inversión y el desarrollo de las economías regionales".
Por su parte, la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR) señaló que la actividad inmobiliaria rural no logró alcanzar los niveles de reactivación esperados y remarcó que "hay resultados claros de freno en toda la actividad".

"Lo que oportunamente se presentó como un ligero indicio de reactivación en el sector, registrado hasta abril, comenzó a diluirse en forma significativa con las reiteradas devaluaciones. Dentro del tercer trimestre se notó que los valores de los campos fueron en descenso, en línea con lo que se venía produciendo en los últimos años", explicaron.

El planteo local

La Unión Industrial de Catamarca (UICA) comenzó a trabajar junto a la Municipalidad de la Capital en una reducción de impuestos para enfrentar la situación económica que afronta el país. Mientras el Gobierno lanzó un subsidio al flete, la UICA pide una exención del pago de espacio aéreo incluido en la factura del servicio de energía eléctrica y es un tributo municipal. El impuesto corresponde al 6% sobre el servicio y, según evaluó, representa una cifra más que considerable para la industria, que paga montos millonarios.

En tal sentido, ante una eventual reducción de $200.000 o $300.000 que podría significar si se deja de pagar el espacio aéreo, desde la UICA remarcaron que el impuesto al flete, que tiene un tope de $500.000 anuales, no tendría gran impacto.n